Hoy tengo la fortuna de poder escribir mi primer artículo en un medio mítico , especialmente para mi, Cambio 16. Aún recuerdo que su aparición en 1971 coincidió con una etapa crucial para una España donde la dictadura agonizaba y la incertidumbre sobrevolaba al país. Eran años oscuros y además para los jóvenes de entonces como yo, en plena etapa universitaria y tratando de buscarme un hueco para iniciar mi propia vida, era tan sombrío como ahora o probablemente mucho más. Y a todo ello, habría añadir la tristemente famosa y ya olvidada crisis del petróleo que en los 70 azotó al planeta y lo que en otros lares fue un fuerte resfriado, aquí fue una neumonía doble. Crisis política, social y económica o al menos así lo recuerdo yo como “teen ager”. Y ha pasado ya más de medio siglo. En aquellos años, el mundo estaba cambiando también y en una efervescencia brutal, tratando de superar la posguerra mundial y entrar en una nueva era. Empieza la reconstrucción de Europa con el tratado de Roma y con Robert Schuman, crean el sueño de una Europa unida. Luego llegan los movimientos sociales de toda índole, Mayo 68 en Paris, con el movimiento estudiantil en la Sorbona, pero también en la universidad de Berkeley en California, en la London School of Economics o la la Universidad Libre de Berlin. Personajes tan influyentes como Chomsky, Sartre, Althusser, Simone de Beauvoir, Derrida, Foucault o Erich Fromm, entre muchos otros, luchaban por difundir sus ideas. En los EEUU, la lucha por los derechos civiles encabezada por Martin Luther King, Rosa Parks enfrentados aún a un Ku Klux Klan tenebroso. Aún recuerdo en los JJOO de Mexico 68 donde se produjo pocos días antes de empezar, la horrible matanza en la plaza de las Tres Culturas de Tlateloclo. Pocos días después los atletas norteamericanos John Carlos y Tommie Smith, levantaron sus puños con un guante negro en su mano izquierda para denunciar la discriminacion racial en su país y su adhesión a los movimientos sociales que salían por doquier en muchos países . La aparición del movimiento hippie, presentaba su propuesta y alteraba la sociedad civil con propuestas disruptivas y enfocadas en la libertad y la paz . “All you need Is love” cantaban The Beatles. Vivíamos momentos convulsos y pero buscábamos un mundo mejor. Una vez más, el planeta estaba dividido en dos, pero aunque algunos movimientos buscaban lo mismo, entre ellos, surgían enormes diferencias pues elegían vías distintas. Estábamos en plena “Guerra Fría”’y los dos bloques mundiales, Rusia y EEUU se vigilaban y amenazaban constantemente, provocando conflictos bélicos en distintas geografías para demostrar su poder. A finales del SXX, cae el muro de Berlín y la URSS desaparece. Pero aquello no dejó de ser un espejismo. Los perdedores se transformaron, se recuperaron y con distintos hábitos han vuelto a la carga y nos hallamos de nuevo ante una repetición de algo que ya sucedió, pero esta vez con una Rusia con un zar moderno y poderoso y con unos EEUU que han dejado de ser los rangers del planeta.
Dice el refranero español que “quien no sabe lo que busca, cuando encuentra, no sabe lo que encuentra” y en mi humilde opinión, esta ha sido la enorme paradoja que ha regido y sigue rigiendo la historia de la humanidad. Seguro se preguntarán porque todo este recordatorio. Pues bien, voy a tratar de explicarlo. La evolución del mundo y su historia va en función de cómo las ambiciones de poder de unos pocos,modifican la geopolítica del planeta y mediante instrumentos manipuladores nos enfrentan a todos entre sí , porque aunque lo parezca, este no es un mundo bipolar, es multipolar, donde los conflictos se convierten el primero batallas políticas y dialécticas de unos contra otros. Luego las partes se van escindiendo en luchas de poder, ambiciones y vanidades que son demasiadas veces ridículas, pero que sin darnos cuenta se transforman en odios viscerales y actuaciones violentas que nos trasladan al pasado desvelando la esencia más irracional del ser humano. No querría hundirme en el pesimismo, pero la historia, se repite, en tiempos distintos, con personas diferentes y la geografía es siempre nuestro amado planeta.¿ Cuantas personas inocentes han sufrido , malvivido o fallecido por decisiones egoístas que algunos dirigentes con ansias de poder tomaron en su momento? Millones. Y ahora ya en pleno SXXI, llegamos pensando que nuestra capacidad de progreso, científica,de innovación, nos haria mejores y más sensatos. Incluso algunos llegaron a pensar que casi alcanzaríamos la inmortalidad del ser humano y la gran paradoja y lección que no se si hemos aprendido, es que somos muy frágiles y efímeros. Poder, riquezas, vanidades….¿ Y todo para que? El día que mueres, desapareces. Tardarás más o menos, pero tu recuerdo se difuminará en el tiempo. ¿Para vivir mejor mientras estemos en este mundo? No se necesitan grandes riquezas, pues siempre conllevan problemas. El sueño debería ser conseguir el bienestar y la armonia que cada uno considere que necesita sin perjudicar a terceros. Ya se que es una utopía, pero la muerte es una realidad y ahí se acaba todo, al menos para mi, pues mi inteligencia es tan limitada que no soy capaz de entender un más allá y me sabe mal, me gustaría creerlo pero quienes lo explican son cada vez menos creíbles, aunque los respeto. Y si, seguro que algunos me dirán que si, que hay una vida más allá, pero me limito a tratar de hacer lo mejor que se y puedo en este mundo en el que me ha tocado vivir y luego si todo eso existe, será la culminación de un sueño increíble, pero no voy a cambiar mi forma de actuar para alcanzar algún paraíso que no soy capaz de entender. Además ahora quizás ya en mi tiempo de descuento, no entiendo y me cuesta aceptar lo que veo, oigo y me toca vivir ¿Por que? Simple y complicado a la vez. Veo en la modernidad y disrupción del mundo, tendencias y ambiciones del pasado. Antes y quizás durante la pandemia, estaba convencido de que íbamos a entrar, salvando las distancias en una era parecida a los años 50/60/70 del siglo pasado como mencionaba al principio, pero estoy descubriendo que estamos más cerca de los años 20/30/40. ¿Presagios bélicos? Mal que me pese, diría que si y de todo tipo, pero se escuchan tambores de guerra y el río suena. Olfateo que las decenas de conflictos de toda índole que se generan por todo el planeta, pueden acabar en una contienda mundial en donde se formen bandos como siempre, artificiales. Sería en realidad una guerra de todos contra todos, de vendetas y de ambiciones de poder donde unos dirigirían y otros morirían inútilmente. El final, como siempre ganadores y perdedores, pero lo cierto es que quien perdería de verdad, sería como siempre los fallecidos, heridos , familias y geografías destrozadas y la perdida de vidas, es irreparable. Surgiría un nuevo orden y vuelta a empezar. La Segunda Guerra Mundial, sirvió para evitar la instauración del nazismo y esta fue la buena noticia, pero que nadie olvide los millones de muertos de la guerra y el resultado de que algunos de los vencedores, se convirtieron en regímenes tan criminales como los que combatieron, pero lo hicieron creando estados opacos y totalitarios donde campaban a sus anchas aunque también es cierto que entre ellos como en todas partes, se produjeron luchas internas de poder fratricidas durísimas, siguieron azotando la humanidad. Pero así es la historia . En estos momentos estamos focalizando la salida de esta pandemia que nos ha tenido encarcelados física y mentalmente y que ahí sigue desparramada por el planeta y a pesar de los grandes esfuerzos realizados, aún vamos a tientas. ¿Que entiendo que sucederá y disculpen mi actitud de visionario? Pues que nos adentramos a una salida en tromba hacia unos nuevos años 20 pero del SXXI y si no somos capaces de gestionar esta situación socio, política y económica, compuesta por una enorme fragmentación del ideario social y político actual en todas partes y la ambición geopolítica de algunos países, volveremos a la andadas. Y déjenme que les diga que no veo a la ONU ni a otros organismos que se han creado en estos años y que se han convertido en mamuts híper burocratizados, lentos, poco ágiles y que a pesar de sus esfuerzos y buenas voluntades, suelen llegar tarde a los conflictos, como elementos que sean capaces de solucionar conflictos de este tipo. Imagino que más de uno me dirá que proponga soluciones o que aporte aspectos positivos. Les diría que puedo, pero son tan naifs que no me atrevo ni a mentarlos, pues los humanos pasamos de la sofisticación a seres primarios demasiado rápidamente, sin intervalos de reflexión , de racionalidad.
Si diría que entre todos deberíamos trabajar para mejorar la educación y pedagogía en todo el planeta, enseñando el respeto y la solidaridad, pero algunos, espero que no demasiados, se mofarán de mi.. La ignorancia promueve la manipulación de los pueblos aunque es cierto, que la educación sesgada e interesada, también. En estos últimos años, la hipermovilizacion de la gente, ha hecho al planeta más pequeño . Viajar, conocer , descubrir y compartir nos permite darnos cuenta que no somos tan distintos y que las fronteras son artificiales. También hemos avanzado enormemente en ámbitos tecnológicos que deberían permitir un mundo más eficiente y mejor, pero debemos hallar soluciones para obtener el bienestar de una población que sigue creciendo exponencialmente y los recursos del planeta empiezan a escasear y de ahí surge otro gran problema, la proyección de nuestra casa, nuestro planeta aunque unos pocos muy ruidosos, lo nieguen. Hemos creado empresas estado que dominan la comunicación y disponen de más información que los propios estados y esto tiene una doble vertiente que es su uso, para bien y para mal una vez más . La comunicación es hoy en día algo imparable, pero es tan abrumadora que parece que todo vale y ya nadie sabe diferenciar entre lo verdadero o lo falso y este es un nudo gordiano de muy difícil solución que nos devuelve al ámbito de la manipulación. Y me atrevo a decir sin ambajes que el planeta nunca había estado tan comunicado tecnológicamente y para mi , siento que la gran paradoja, es observar que el ser humano está menos comunicado que nunca. Estamos perdiendo a marchas forzadas la relación entre personas. Nos comunicamos a través de la inteligencia artificial, que con todos mis respetos es eso, artificial y no por ello debemos restarle importancia, pero si darle la relevancia y el rol que merece. Mientras, por el camino, estamos perdiendo la inteligencia emocional, algo que nos hace más humanos y ser humano es un privilegio que no debemos perder. Yo mientras pueda y tenga fuerzas lucharé por ello y eso para mi, eso es la audacia de vivir, es un mundo cada vez más competitivo, individualista, ambicioso y en donde la verdad se confunde con aquello que algunos quieren convertir en su verdad. Estamos a tiempo, pero no podemos esperar mucho.
Persigue tus sueños, por Gabriel Masfurroll 